Los Espartanos ya tienen su propio libro por La Nación
Gracias LA NACIÓN por la difusión.
«No permanecer caído» es el relato escrito por Federico Gallardo, sobre el equipo surgido en 2009, impulsado por Eduardo Coco Oderigo.
«¿Es un libro duro, doloroso triste? ¿O tiene final feliz?» La pregunta surgió desde las sillas del público y la respuesta de Federico Gallardo, autor de «No permanecer caído» surgió espontánea: «Es un libro con esperanza». La historia de Los Espartanos, el equipo de rugby nacido en 2009 en el pabellón 8 de la cárcel de máxima seguridad de San Martín, ya tiene su relato escrito y fue presentado ayer en La Botica del Ángel.
Gallardo, futbolero de alma y que no tiene reparos en confesar sus prejuicios respecto al mundo del rugby antes de sumarse a esta experiencia hace cuatro años, estuvo acompañado por Eduardo «Coco» Oderigo , ex jugador del SIC y promotor de esta idea a partir de una primera visita a la unidad penitenciaria, y por su compañero de misión Jorge «Negro» Mendizábal, también ex rugbier (jugó en Pueyrredón) que trabaja junto a Oderigo desde el primer momento.
Pero sin dudas, las estrellas del encuentro fueron el Chino, el Colo, la Liebre y Emi, algunos de los «espartanos» que ya dejaron el penal pero continúan ligado a un proyecto que no deja de multiplicarse. «Estoy entrenando a 16 chicos de mi barrio, Libertad, en Merlo, e intento transmitirles los valores que me enseñó este deporte y que me cambiaron la cabeza», explicaba el Chino. «Viajo con mi novia todos los domingos cuatro horas en moto desde Tortuguitas a La Plata para jugar con los chicos del Hogar San Lucas, pibes huérfanos y con discapacidades severas», contaba el Colo, abandonado por su madre a muy temprana edad.
Las suyas son algunas de las 15 historias que relata Federico Gallardo relata, todas ellas recogidas «en charlas con el corazón abierto, en las que ellos se iban abriendo y todos terminábamos llorando». Publicado por la Editorial Logos, «No permanecer caído» se vende en las librerías El Ateneo y Cúspide, y todos los fondos obtenidos serán destinados a la Fundación Espartanos, cuyos voluntarios ya han logrado reproducir el proyecto en 35 cárceles del país.
Una serie televisada y la afiliación a la Unión de Rugby para empezar a competir de manera regular aparecen en el horizonte a medio plazo. Pero para eso habrá que esperar. Por ahora, lo recomendable es sentarse a leer y emocionarse con estas 15 historias de esperanza.
Fuente: LA NACIÓN