Luis Bernardo Gallardo

Una ronda de mates, estás con Gonza y Nico. El Barba los mira, maravillado, a los tres sonreír. Vos contás una anécdota de una cortada de pasto con uno de tus tractores. Tu hijo y tu nieto se ríen. Te entusiasmás y te sentás sobre el borde de la silla. Empezás a hacer ademanes y a subir el tono de voz, tenés el control de la situación. El Barba se ríe cada vez más. Estás a punto caramelo para rematar la historia pero un loro interrumpe con un grito que se escucha de lejos: “Forrrrrrooo”.

El silencio invade la ronda. Entrecruzás miradas con todos. El Barba escupe el mate, se hecha para atrás y suelta una carcajada, vos, Gonza y Nico también.

El cielo es una fiesta, la misma fiesta que producía escucharte.

Esperanos con unos mates LuisBer querido y mantené el agua caliente que no sabemos cuando nos sumamos a la ronda.

Te pido un favor y no te jodo más, hacenos acordar todos los días que nos queden en esta tierra, de vivirlos con una sonrisa.